lunes, 2 de junio de 2014

UÑAS NEGRAS: QUÉ SON Y CÓMO TRATARLAS EN CORREDORES



Uñas negras: qué son y cómo se producen

Es habitual entre los corredores tener uñas negras, son una seña de identidad, aunque si no se tratan bien pueden resultar molestas y provocar dolor en los dedos del pie, dejando de lado que no es nada estético ir con los dedos morados.
Este fenómeno se denomina hematoma subungueal y puede aparecer por diversos motivos. Uno de ellos es obviamente un fuerte golpe sobre la uña, como la caída de un objeto pesado sobre ella, pero la que a nosotros, los corredores, nos interesa es la siguiente.
En primer lugar se debe a un traumatismo de repetición, es decir, todos los pequeños golpes que los dedos realizan dentro de la zapatilla con el interior de la misma mientras corremos, en cada zancada.
La suma de todos ellos hacen que finalmente se cree un hematoma bajo la uña de un dedo, dando lugar a la uña negra si no se evita. Es por esto que es más común que las uñas moradas aparezcan en corredores que realizan largas distancias (más impacto) y en aquellos que los que entrenan o compiten en zonas con desnivel, ya que en las bajadas los dedos chocan constantemente con el frontal de la zapatilla.


Cómo tratar y curar las uñas negras

Cuando se produce un hematoma en un dedo cerca o bajo una uña lo mejor es no esperar “a ver qué pasa”, sino tratarla antes de 72 horas, en las cuales será posible sacar la sangre acumulada. Si el hematoma está localizado alrededor de la uña, se puede drenar la sangre. 
Si la sangre está debajo de la uña, un lugar inaccesible, hay que drenar la haciendo un orificio en la propia uña, de forma que sea una vía de escape para la sangre. En este caso el procedimiento es un poco más laborioso y lo más recomendable es acudir a un Podólogo para que lo haga,no duele nada y el alivio es instantáneo, ya que desaparece la presión de la sangre.
Si no sigues estos consejos y prefieres dejar que la uña se cure con el tiempo, lo más probable es que acabes perdiéndola, ya que se pondrá negra y comenzará a crecer otra debajo de ella, que finalmente ira empujando “a la antigua” hasta reemplazarla y caerse, un proceso que puede durar muchos meses.



¿Se pueden prevenir estos hematomas?

No hay una fórmula exacta para hacerlo, pero algunos consejos son:
  • Asegurarse de utilizar el número correcto de zapatilla: esto es primordial y básico, si la zapatilla es chica los golpes serán continuos al correr y estará más presionado.
  • Mantener las uñas de los pies cuidadas, bien cortadas
  • Tratar de mantener el pie seco durante largas salidas, usando medias de algodón.
  • Relacionado con la zapatilla, tenemos que atar bien los cordones, para tener el pie bien sujetado.
Con todo esto, ya conocemos un poco más sobre el problema de las uñas negras, tan extendidas entre los corredores.
Extraído del sitio web, Palabra de Runner.